top of page

La tradición y la modernidad en "Rosarito" de Ramón María del Valle-Inclán


Vida y obra

A veces es difícil distinguir entre la “persona” de este gran escritor gallego y el mito que él mismo creó de sí mismo. Estrafalario, extravagante y bohemio, Valle-Inclán fue un escándalo en el Madrid de principios del siglo XX. Empieza escribiendo, como tantos otros escritores del siglo pasado, bajo la insignia del modernismo y su prosa sensual, erótica, recargada de elementos ornamentales y poéticos representa la cumbre de ese estilo en España. En los años veinte, Valle-Inclán se renueva por completo. Bajo la influencia del vanguardismo forja una nueva forma de expresión que él designo como “esperpento”, que consistía en una deformación expresionista de la realidad, un tipo de caricatura donde se resaltan los elementos más destacados y grotescos. Este estilo se acompañaba por un léxico sugestivo y singular que incluía neologismos y americanismos, y por nuevas formas narrativas y dramáticas. En éste último género, Valle-Inclán se acerca y quizá ensaya el teatro de lo absurdo. Por último, se debe mencionar el interés de Valle-Inclán por España—preocupación que lo liga estrechamente a los otros miembros de su generación. En su etapa modernista captó magníficamente el espíritu decadente y gótico de Galicia, y en la etapa del esperpento echó sus miras al pasado histórico, sobre todo a la época depravada del reinado de Isabel II en el siglo XIX. A pesar de haber escrito durante el primer tercio del siglo XX, Valle-Inclán es quizá el autor español más original de ese siglo.

Jardín umbrío (1903)

Preguntas de pre-lectura para “Rosarito”

1. ¿A qué edad aproximadamente empiezan las jóvenes a interesarse por los varones? 2. ¿Crees que dos personas de edades muy diferentes pueden amarse? Explica. 3. ¿Crees que algunas personas pueden seguir siendo atractivos aún en la avanzada edad? Da algún ejemplo.

Códigos para la comprensión de “Rosarito”

Sonatas (1902-1905)

Código literario: Aunque el modernismo se expresó principalmente en el campo de la poesía, también lo hizo en la prosa. Rubén Darío, por ejemplo, escribió cuentos en su famosa colección Azul de 1888, obra que inicia el movimiento modernista. Como en poesía, el modernismo en prosa busca un estilo pulido, refinado, sensual, musical e impresionista; prefiere describir un mundo elegante en vez de los detalles escabrosos y mundanos de la realidad. Valle-Inclán es quizá el mayor exponente en España de este estilo en prosa. Sus obras más famosas en ese estilo son las Sonatas, escritas entre 1902 y 1905, que cuentan las aventuras amatorias del Marqués de Bradomín en cuatro etapas de su vida: la adolescencia, la juventud, mediana edad y vejez. El personaje de Juan Manuel de Montenegro, que aparece en el relato “Rosarito”, es pariente de Bradomín, y comparte con éste su altivez, libertinaje y sensualidad.

España produjo una rica literatura romántica que se recuerda en este relato, con los dramas románticos El trovador de García Gutiérrez (1813-1884), Don Juan Tenorio de Zorilla, así como la poesía de Espronceda.

Fernando VII

Código histórico: En 1814, cuando terminó la guerra de Independencia contra Napoleón y volvió al trono el rey Fernando VII, los liberales españoles intentaron hacerle aceptar una monarquía constitucional que limitaba bastante su poder y concedía muchas libertades a los españoles. Fernando se negó a aceptar estas condiciones y empezó a perseguir a sus enemigos políticos. Muchos españoles liberales tuvieron que marcharse al exilio para salvarse de la ira del rey. Don Miguel de Montenegro pertenece a este grupo de románticos liberales españoles. Por lo tanto, la obra tiene lugar alrededor del año 1824, porque la emigración empezó en 1814 y don Benicio dice en la narración que Montenegro lleva unos diez años en el exilio.

Galicia

Galicia

Pazo gallego

Código geográfico: De las regiones españolas, la de Galicia, en el extremo noroeste peninsular, fue la que más conservó las tradiciones antiguas e incluso feudales hasta el siglo XX. Entre estas tradiciones se tendría que incluir el concepto del mayorazgo, que era un sistema de herencia por el cual solo el hijo mayor de una familia recibía la herencia de los padres. Ese hijo luego tenía la obligación de cuidar y mantener el resto de la familia. Además, la nobleza gallega mantenía el orgullo de la vieja hidalguía española. En Galicia, los grandes caserones o palacetes de los nobles se llaman “pazos”.

Preguntas de comprensión para “Rosarito”

1. En el capítulo I se pinta el escenario con un estilo muy típico del modernismo. Estamos en un gran salón de un pazo gallego.

1.1. ¿Quiénes son los tres personajes en la escena?

1.2. ¿Qué hace cada uno?

1.3. De los tres, la que mayor atención recibe es Rosarito. Explica cómo la describe físicamente el narrador.

1.4. Nota el estilo. ¿Es realista o poético; directo o emotivo; parco o elaborado? ¿En qué sentido es típico del modernismo?

2. En el capítulo II, Rosarito se agita por lo que ha visto en el jardín. ¿A quién cree haber visto? ¿Cómo recuerda Rosarito a don Miguel de Montenegro? 3. El cuento capta magistralmente los estados de ánimo de la adolescente Rosarito.

3.1. ¿Qué revela a principios del capítulo II? ¿Y al final de ese capítulo? ¿Cuál sería la causa del miedo que parece sentir la niña?

3.2. Entre las líneas 256-263 del capítulo V, ¿qué empieza a sentir Rosarito por Montenegro? ¿Sigue teniendo miedo? Explica esta oposición de sentimientos.

3.3. Sus sentimientos se complican aún más en el último párrafo del capítulo VI. ¿Qué nuevo sentimiento experimenta ahora? ¿Cómo se relaciona este nuevo sentimiento con su profunda religiosidad?

3.4. ¿Qué efecto produce en ella la mirada de Montenegro?

3.5. A finales del capítulo VII, cuando tiene que llevar a Montenegro a su habitación, el narrador la describe como si estuviera cerca de la muerte. ¿Está enferma Rosarito? ¿Qué podría ser?

4. La conquista de Rosarito por Montenegro se lleva a cabo también lentamente. Trata de explicar las siguientes acciones de Montenegro:

4.1. Montenegro conoce el nombre de Rosarito, y dice que le recuerda a su tía, con quien tuvo Montenegro relaciones en Lisboa.

4.2. Le dice a la Condesa: “es muy linda la pequeña… ¡Demasiado linda para que pueda ser feliz!”.

4.3. En una discusión con el capellán en que Montenegro expresa su escepticismo, le dice a Rosarito: “¡No temas, hija mía! Si no creo en Dios, amo a los ángeles…!”.

4.4. Mientras Rosarito hace su labor de agujas, Montenegro la contempla, y el narrador dice: “¿Tenía él, como todos los grandes seductores, esa intuición misteriosa que lee en lo íntimo de los corazones y conoce las horas propicias al amor?”

4.5. En el capítulo VI le pregunta Montenegro si ella lo ocultaría en su alcoba si lo vinieran a prender. Rosarito no responde.

5. El narrador describe a don Manuel de Montenegro como un hombre de “gallardía donjuanesca”. He aquí un ejemplo de intertextualidad, Valle-Inlcán espera que el lector sepa quién es don Juan. Como has leído El burlador de Sevilla de Molina y Don Juan Tenorio de Zorilla, sabrás ciertas características del don Juan que automáticamente se transfieren a este personaje. ¿Qué, en particular, esperaríamos de un don Juan?

5.1. ¿Se verifican estas características en esta narración?

5.2. Otra característica del prototipo de Tirso de Molina es que se trata de un personaje atractivo y gallardo. ¿Es Montenegro así también?

5.3. El discurso donjuanesco se repite en otro momento cumbre de la narración. La Condesa le dice a Montenegro que algún día tendrá que darle cuentas a Dios por sus pecados, a lo cual Montenegro responde: “Te juro prima, que, como tenga tiempo, he de arrepentirme: ¿Cómo se relacionan estas palabras con las famosas de don Juan “Tan largo me lo fiáis”?

6. La Condesa conoce muy bien la reputación de Montenegro y, cuando éste halaga a Rosarito diciéndole lo bonita que es, responde: “¡No me la atormentes, primo!”. Sin embargo, al final del cuento, le pide a Rosarito que lleve a Montenegro a su habitación con estas palabras: “Tú le alumbrarás y le enseñarás el camino, pequeña”. Comenta esta cita—su ironía y su doble sentido. 7. Después de las palabras de la abuela en la pregunta anterior, y mientras Rosarito espera a Montenegro para acompañarlo a su cuarto, el narrador describe a Rosarito metafóricamente como una “desposada”. ¿Qué significa esa palabra?

7.1. ¿Cómo tiene los ojos?

7.2. ¿Por qué crees que sufre “palpitaciones”?

8. En el capítulo VIII, un grito despierta a la Condesa, por lo que se levanta para ir al cuarto de Rosarito. El ambiente está lleno de signos de premoniciones trágicas. ¿Qué la persigue al salir del cuarto? ¿En qué estado está el animal?

8.1. ¿Cómo se personifican las velas del candelabro de plata en el cuarto de Rosarito?

8.2. El narrador describe una mancha negra que pesa sobre el muro. ¿Qué formas animales toma esa mancha implícita y explícitamente?

8.3. ¿Qué sonidos tienen para la Condesa estas murmuraciones trágicas?

9. Finalmente, ve a Rosarito. Describe el estado en que la encuentra.

Preguntas para una lectura más a fondo de “Rosarito”

1. El relato está repleto de premoniciones. En el capítulo II, Rosarito cree ver a alguien (Montenegro) en el jardín. Se interpreta lo que vio de distintas maneras.

1.1. ¿Qué cree el capellán que vio?

1.2. ¿Cómo lo interpreta Rosarito?

1.3. Explica cómo su interpretación prepara al lector para lo que pasa al final.

1.4. Busca otros ejemplos de premoniciones en el relato.

2. Muchas veces las premoniciones se dan por medio de símbolos o del uso de metonimias. Por ejemplo, en el último capítulo, mientras duerme la Condesa, el narrador cuenta que “encima del velador parecen hacer otro tanto el bastón del mayorazgo y la labor de Rosarito”. ¿Qué representan simbólicamente el bastón y la labor durmiendo?

2.1. Luego un ratón “atraviesa la sala con gentil y vivaz trotecillo”. ¿Qué podría representar simbólicamente el ratón que huye?

3. El simbolismo, elemento empleado con frecuencia en la prosa modernista, no es nada más que un signo cuyo significante conlleva un mensaje muy diferente de su significado, pero que se entiende dentro del sistema de significación de la obra. Hay muchos ejemplos en este relato, pero enfoquémonos en solo uno. Al final, ¿cómo “murió” Rosarito?

3.1. ¿Qué podrían representar los signos del alfiler clavado en el pecho y el hilo de sangre?

3.2. Visto de este modo, ¿crees que la muerte de Rosarito es también simbólica? ¿Qué podría representar?

4. El lector que lee la prosa de Valle-Inclán sólo por la trama y la acción que contiene perderá lo más importante de su obra: el exquisito estilo modernista. Enfoquémonos en solo un aspecto sobresaliente: el sensualismo. ¿Cómo se describe el jardín en el primer capítulo?

4.1. Explica qué tiene de sensual esta descripción.

4.2. ¿Por qué crees que sus ramajes son misteriosos?

4.3. El jardín se vuelve a describir en el capítulo VI. Allí se notan sonidos y aromas. ¿Qué crea el sonido?

4.4. Busca palabras onomatopéyicas.

4.5. Trata de identificar otros aspectos sensuales en la prosa de Valle-Inclán.

Temas para investigar

1. El relato como ejemplo del enfrentamiento entre la vieja sociedad tradicional y la modernidad en el cambio de siglo en España. 2. La muerte de Rosarito en contraste con la supervivencia de don Manuel de Montenegro. 3. Una comparación entre los modelos de identidad de género en “Rosarito” y Don Juan Tenorio de José Zorilla.

Bibliografía mínima

Andrews, Jean. “Saints and Strumpets: Female Stereotypes in Valle-Inclán”. Feminist Readings on Spanish and Latin-American Literature. Ed. Lisa P. Condé y Stephen M. Hart. Lewiston: Edwin Mellon P, 1991. 27-35.

González del Valle, Luis T. “Ramón María del Valle-Inclán”. Feminist Encyclopedia of Spanish Literature. Ed. Maureen Ihrie y Janet Pérez. Westport: Greenwood Publishing Group, 2002. 336-638.

Gullón, Ricardo, ed. Valle-Inclán: Centennial Studies. Austin: U of Texas P, 1968.

Lima, Robert. Ramón del Valle-Inclán. New York: Columbia UP, 1972.

Nickel, Catherine. “Pale Hands and a Trickle of Blood: The Portrayal of Women in Valle-Inclán’s Rosarito and Beatriz”. Nuevas perspectivas sobre el 98. Ed. John P. Gabriele. Madrid: Iberoamericana, 1999. 271-81.

Smith, Verity. Ramón del Valle-Inclán. New York: Twayne, 1973.

Zahareas, Anthony. Ramón del Valle-Inclán: An Appraisal of His Life and Works. New York: Las Américas, 1968.

Featured Posts
Check back soon
Once posts are published, you’ll see them here.
Recent Posts
Archive
Search By Tags
No tags yet.
Follow Us
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page